Podemos pedir un imposible a San Benito con esta poderosa oración, en esos momentos en que no encontramos salida a un problema imposible de solucionar para nosotros, los mortales, pero, posible para este poderoso Santo Italiano.
Rogamos a San Benito que interceda por nosotros ante esta necesidad urgente, ante la cual necesitamos un milagro, y por intermedio suyo, rogamos a nuestro Señor Jesucristo que nos perdone y nos conceda este favor tan especial.
Invocamos tu poderosa intercesión y confiamos plenamente en que recibiremos por intermedio tuyo este milagro que hoy necesitamos y que ponemos en tus manos santas y el poder que el Señor te ha conferido.
PIDE UN IMPOSIBLE A SAN BENITO
Si tienes la medalla de San Benito, tómala en tus manos mientras haces está oración con mucha devoción.
En el nombre del Padre todopoderoso, de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo y del Espíritu Santo, acudo a ti Padre de los benedictinos.
Poderoso santo y patrón de Europa, humildemente te suplico que me concedas este milagro que necesito con urgencia en mi vida.
Estoy preparad@ para recibir esta ayuda del Señor a través de ti y promulgar la fe en ti a todas las personas que más pueda.
Desde mi corazón, te doy gracias San Benito, porque siento en mi interior que tu ayuda llegará ahora que es cuando más la necesito.
Con el poder que te ha conferido nuestro Padre celestial, destruye el mal que hoy está presente en mi vida, este que me está causando tanto daño y no tiene ningún poder sobre ti.
Aleja de mí todas las fuerzas malignas, amado santo; lléname de la misma devoción al Señor con la que tú, te destacaste en vida y lograste vencer la maldad que te rodeaba.
San Benito, ayúdame a superar esta dificultad y que todas las cosas en mi vida tomen nuevamente un rumbo normal.
Te pido que me bendigas con tu protección tan poderosa, y que escuches mi llamado cuando te invoco en mi soledad.
Te ruego que aceptes mi oración, no me abandones en este momento en que me siento tan incapaz de superar esto sin tu ayuda y sin la misericordia del Señor Jesús.
Un milagro espero de ti, san Benito, un milagro que te pido con todo mi fervor, porque conozco algunos de los muchos milagros que se te atribuyeron en vida y después de ella.
Tú, que estás tan cerca del Señor, ruega por mí, por el perdón de mis pecados ahora y en la hora de mi muerte.
Consuélame en mi sufrimiento y mi preocupación, haz que pueda recuperar mi paz.
En tu corazón bondadoso me refugio san Benito, con toda mi fe; y te guardo en mi corazón con todo mi amor y profundo agradecimiento.
Concédeme el deseo de mi alma, por el cual acudo a ti en esta ocasión, ten misericordia y compasión de mí y muéstrame tu caridad.
Protégeme también San Benito de los seres llenos de maldad que me rodean, de las envidias, los estafadores, mentirosos y traicioneros.
Ayúdame a ser fuerte ante las tentaciones, como lo fuiste tú. A estar cada día más cerca del corazón de Jesús y María. Y a agradarles con mi vida, con mi fe y mis buenas acciones.
Con todo mi fervor y confianza en que obtendré de ti, San Benito, el “imposible” que hoy te pido, te entrego mi corazón agradecido.
Amén.
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