En la oración de sanación realizada con verdadera fe podemos encontrar la respuesta a nuestra angustia. Deja tu salud en sus manos, solo él podrá restaurarte por dentro y por fuera.
Lee o escucha esta poderosa oración de sanación en la intimidad de tu habitación o en un sitio tranquilo todas las veces que sientas la necesidad de hacerlo, que quieras conectarte con el señor para pedir por tu salud, o que te sientas desfallecer en tu fe.
ORACIÓN DE SANACIÓN MILAGROSA
Sáname Señor, mírame con tus ojos bondadosos llenos de amor y misericordia, apiádate de mí y permíteme sentir este milagro en mi cuerpo.
Realiza tu obra en mí ahora Señor, límpiame de toda impureza que este dañando mi cuerpo y produciendo este doloroso sufrimiento y enfermedad.
Ayúdame a comprender la lección que trae para mí esta enfermedad para poder seguir adelante con mayor sabiduría.
Sáname Señor, haz que cada una de mis células se renueve por completo, trayendo a mi vida una nueva oportunidad.
Tómame en tus fuertes brazos y ordena a esta enfermedad que me abandone para siempre, sé que nada puede resistirse a tu poder Señor.
Señor Jesús, te pido que, así como te sacrificaste por amor a mí en la cruz, hoy me permitas sentir ese amor a través de mi total sanación.
Libérame de mis culpas Señor, intercede por mi ante el Padre y enséñame a serte siempre fiel.
Sáname Señor, ten piedad de mí, cobíjame con tu abrigo y con tu luz de sanación y hazme brillar de nuevo hasta sentirme sana y fuerte.
Límpiame de mi enfermedad y de mis dudas, lléname de fortaleza interior y exterior para vivir una vida que sea agradable a ti y seguirte alabando con mis acciones, mi testimonio y mi fe.
Amado Señor Jesucristo, aquí estoy, débil, asustada, insegura, pero entregada por completo a ti en cuerpo y alma, dispuesta a luchar por la oportunidad de sentirme sana de nuevo.
Sáname Señor, solo una palabra tuya bastará para sanarme y hacerme resurgir de esta enfermedad.
Tócame Señor, hazme sentir tu presencia en estos momentos, porque sé que de esta manera todo lo malo desaparecerá.
Renuévame en la fe, enséñame a ser digna de tu amor y tu misericordia, guíame por caminos de verdad y aléjame de las cosas impuras.
Con este sentimiento de bienaventuranza que me envuelve porque estas a mi lado y me estas escuchando, te pido una vez más que me perdones y me limpies de todos los errores que he cometido y que me han conducido a esta enfermedad.
Sáname Señor, libérame Señor, hazme una nueva persona, y ayúdame a que a partir de hoy no me separe de ti ni de tus enseñanzas de amor.
Amén.
