Bella oración a Jesús para dormir tranquilamente, pero, sobre todo, dormir sintiendo la presencia del Señor Jesús en nuestro interior, dormir en paz y llenos de gozo espiritual.
Haz o escucha esta oración a Jesús cada noche antes de dormir, y descarga en esta poderosa conexión con Jesús todas las preocupaciones que a veces nos perturban durante la noche y no nos dejan tener un sueño tranquilo.
Esta hermosa oración de la noche a nuestro Señor Jesús es una bella inspiración para invocar la presencia del Señor en nuestro corazón. Una invitación a Jesús para que nos permita sentir su presencia en lo más profundo de nuestro ser.
Solo nuestro Señor Jesucristo, puede quitar el peso que cargamos en nuestra alma, mente y cuerpo cada noche.
Solo Él puede aliviar la pesadez de nuestras cargas diariamente y prepararnos para un nuevo día lleno de bendiciones.
BELLA ORACIÓN AL SEÑOR JESÚS
Amado Señor Jesucristo, padre de todos los santos y redentor nuestro.
Miro al cielo en esta hermosa noche y te veo en cada estrella, en cada pequeño lucero que palpita en la inmensidad el universo.
Cómo palpitas Tú en mi vida, en el fondo de mi corazón. Iluminando todas mis oscuridades.
Trayendo la esperanza cuando parece que no hay soluciones, cuando no sé que hacer.
Llegas Tu con presencia silenciosa y majestuosa, llenándome desde adentro, habitando dentro de mi ser.
Haciéndote sentir en todas las situaciones de mi vida, sanando, solucionando, iluminando.
Abriéndome los sentidos y el corazón para que se giren hacia Ti.
Para que todo lo vea y sienta a través de Ti.
Haciéndome sentir un gigante ante los problemas, que o tienen ningún poder sobre mí.
Porque en esta noche, Tú estás conmigo, ocupando todo mi ser.
No temo a nada, no me preocupa nada, solo quiero sentir tu presencia y dormir con este sentimiento profundo que inflama mi alma de gozo y tranquilidad.
Señor Jesucristo, quiero gozar del descanso de esta noche sintiendo que Tu habitas en mí.
Que velas mi sueño, preparas para mí un buen mañana y posas tu mirada dulce sobre mí, llenándome del amor celestial que necesito.
Tú eres el eterno amor de Dios vivo, de Ti procede todo lo bueno, lo eterno, lo divino.
Amado Jesús, Tú eres mi bien, mi manantial de amor y de todo lo que necesito.
Ven a mí oh Señor! que toda mi vida transcurra en tu presencia.
Tú, eres el rey, el que gobierna ahora mi mundo; trayendo perfección, amor y sabiduría.
Acariciándome sutilmente con cada bendición de un nuevo día. Con cada nueva mañana y cada noche que transcurre.
Pero siempre en tu presencia, con el corazón puesto solo en Ti.
Te amo Señor Jesús, todos mis pensamientos están dirigidos a Ti en este momento.
Quiero dormir pensando solo en Ti, sintiéndote solo a Ti, contemplando tu presencia en mi interior.
Amén.